ETAPA 1 SA MESQUIDA - FAVARITX (12,74 KM)
5 horas
Empiezo el recorrido en la playa de Sa Mesquida a las 08:30, un día espléndido, una media de 22º C, el mar en completa calma.
Lo primero que podemos ver es la torre de defensa, construida durante la dominación británica en el siglo XVIII.
En el paisaje se puede apreciar la huella de la tramontana, vegetación baja y redondeada, tipo aerodinámica, consecuencia de los vientos cargados de sal.
La primera sorpresa que me encuentro es el macar de Binillautí, una cala de una gran riqueza natural, con una bonita caseta de “sa vorera” con sus ventanas y puerta pintadas de un color azul intenso.
Poquito a poco el camino se va adentrando hacía el interior, por tierras de cultivo (mayoritariamente cebada y trigo), se aprecian por todo el camino las típicas paredes menorquinas (pared seca) hechas con piedras, y hasta veo pastar a lo lejos felizmente a un grupo de caballos y potrillos.
Sobre las 10 llego al pueblecito de pescadores de Es Grau, fantástico el refrigerio a media mañana, que bien sienta el “cafetito”. Una vez descansado un ratito, sigo por el Parc Natural de Sa Albufera des Grau, una joya de la naturaleza, una laguna costera conectada al mar por un canal llamado sa Gola.
A lo largo de la playa de Es Grau, hay un sistema dunar bien desarrollado, la arena es de tamaño mediano, se trata de una playa de aguas poco profundas y con numerosas barcas fondeadas. Justo detrás de la playa esta la zona húmeda.
La siguiente playa es la Cala des Tamarells playa de pequeñas dimensiones y aguas transparentes, encajada en pequeños peñascos con una mezcla de arena fina y cantos rodados.
Siguiendo por el sendero, llego a la Cala de Sa Torreta, llama la atención la torre de defensa situada en un punto elevado, desde donde se puede ver el horizonte marítimo y en su tiempo servia para vigilar las calas o bahías propicias para el desembarque de naves enemigas.
En la playa hay una gran cantidad de posidonea acumulada, la arena es de grano mediano.
El camino transcurre por un paisaje ondulado donde se van alternando hondonadas y pendientes con el paisaje vegetal en mosaico, típico del campo menorquín.
La siguiente playa que me encuentro, Cala Morella se trata de una playa mayoritariamente con guijarros, aguas transparentes. Cuenta con un almacén para barca y utensilios de pesca y un pequeño “llenegall” una rampa para subir la barca desde el mar.
Casi al final ya del itinerario marcado, a lo lejos puedo apreciar el idílico paisaje del faro de Favaritx y admirar la belleza de las playas de En Tortuga y Cala Presili, playas de arena blanca y fina con poca presencia de piedras sobre el arenal. Justo detrás de Cala En Tortuga se encuentra la Bassa de Morella, un estanque declarado reserva natural.
A las 13:30 Llegada, ni pizca de agotamiento y feliz por la belleza de un magnifico paisaje.
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